"La clave para que tu negocio funcione sin ti, es invertir inteligentemente en tu negocio"
Uno de los principales errores de muchos empresarios es creer que solo es necesario una inversión inicial en tu negocio para poder empezarlo y todo lo demás se dará por añadidura, pero la realidad es que el camino para institucionalizar a tu empresa tiene distintas fases, momentos y oleadas de inversión. Aquí te presentamos las cinco oleadas en la que es necesario inyectarle dinero a tu negocio para poder llevarlo al siguiente nivel.
1.- Primera oleada de inversión: El arranque.
Toda gran empresa comienza con una idea. Esta fase inicial es crucial, ya que requiere capital para definir, crear y ajustar el producto o servicio hasta encontrar una manera efectiva de monetizarlo. La inversión inicial es fundamental para sentar las bases de lo que será tu empresa en el futuro.
- Una vez que la empresa ha logrado tener un producto o servicio por el que los clientes estén dispuestos a pagar, la empresa ha pasado a otra etapa de vida.
2.- Segunda oleada de inversión: El crecimiento.
Una vez que has encontrado la forma de monetizar tu idea, el siguiente paso es aumentar tu base de clientes. Esta fase puede requerir una ronda de inversión para soportar y responder al crecimiento del mercado.
- En esta oleada de inversión es necesario invertir en marketing, ventas y atención al cliente para expandir tu base de clientes y establecer una presencia sólida en el mercado. A la par del crecimiento en clientes también debemos de invertir para poder entregar la los productos y servicios y esto implica invertir en personas, en inventarios y en infraestructura.
En resumen, en esta fase debemos de invertir para crecer en clientes y para poder entregar aquello que vendimos. Cabe mencionar que esta segunda oleada puede repetirse durante varios años consecutivos, por ejemplo, si tú decides crecer el siguiente año a 10 millones en ventas, debes invertir para poder vender más y poder entregar a tus clientes. El siguiente año quizá busques crecer a 15 millones y para lograrlo deberás repetir el ciclo antes mencionado.
3.- Tercera oleada de inversión: Profesionalizar al equipo.
Cuando las empresas repiten este ciclo y llegan aproximadamente a vender entre $50 millones y $100 millones necesitan pasar a una tercera oleada de inversión, pero en esta ocasión es para traer a mejores colaboradores en el equipo.
- Hasta este punto el crecimiento de la empresa ha estado recargado sobre los hombros de los fundadores o socios, pero en esta etapa el equipo que se tiene ya no es el adecuado para poder seguir creciendo y es momento de invertir en la contratación de profesionales con mayor experiencia y conocimientos. Esta inversión asegura que tu empresa tenga el talento necesario para manejar operaciones más complejas y sostener su crecimiento.
4.- Cuarta oleada de inversión: Profesionaliza la gestión.
Con un crecimiento sostenido, implementar sistemas de control interno, automatización, digitalización y políticas que ayuden al equipo gerencial y directivo a tomar decisiones acertadas es esencial. Invertir en tecnología y procesos de gestión garantiza que la empresa pueda operar de manera eficiente y eficaz, preparándose para futuros desafíos y oportunidades.
- En esta oleada se debe invertir para poder controlar la operación del negocio y que el equipo directivo y gerencial puedan tomar decisiones acertadas, esta inyección de capital se ve reflejada en la inversión de sistemas de control interno, ERP, sistemas de control presupuestal, sistemas de calidad, digitalización y automatización.
5.- Quinta oleada de inversión: La Institucionalización.
Pensar en el futuro y la posibilidad de institucionalizar la empresa requiere invertir en la estructuración organizativa y sistemas de control. Preparar a la empresa para expansiones o incluso para ser adquirida o fusionada es crucial. Esto implica diseñar una estructura sólida que soporte el crecimiento y establezca un camino claro para la sucesión.
- En esta etapa la empresa debe de prepararse para venderse, fusionarse o tener una sucesión de la dirección general. Para lograrlo es necesario invertir en la creación de acuerdos societarios y en la instauración de un gobierno corporativo.
No obstante, muchas pequeñas y medianas empresas se detienen en las oleadas 1 y 2, sin entender la importancia de invertir tanto en el talento humano como en la profesionalización del negocio. Cuando surgen conflictos entre departamentos o entre miembros de una empresa familiar, es una señal de que la empresa necesita elevar su nivel de profesionalización. No es suficiente simplemente aumentar el salario de los empleados actuales; es crucial contratar al personal adecuado para las necesidades emergentes e invertir inteligentemente en tu empresa para que puedas llegar a la fase de institucionalización.
Espero que estos consejos te sirvan y te ayuden a tomar decisiones informadas en tu camino hacia la profesionalización de tu empresa. ¡El éxito está a tu alcance!
¡Por tu libertad empresarial!
Alejandro Valdés Peña